Empezó la berrea en los campos
de Ferraz y Génova. Las condiciones
son las astas que chocan con trapos
sucios , mugen todo ellos bravones .
¡¡ Muuuu....!! El bramido es escuchado
por toda España ; hace a los lobos,
estar atentos ha que tajadas de bobos
se llevaran a la boca del prado.
Las negociaciones avanzan viendo
que peligran sus privilegios de décadas.
los mercaderes de Europa a horcajadas ,
van tomando posiciones pidiendo.
Los mancebos sindicatos, patéticos
y sin ideas, abren la boca debajo
de la higuera y esperan a que caiga el comistrajo.
Los empresarios son escualos elásticos.
¡¡ Muuuu....!! La urna se agrieta
por los remunerados que zapatean con las tarjetas
negras y se mofan de los jueces con chanzonetas
Los presuntos corruptos creen que la ley viene con ancheta.
- Berrea, berrea de otoño -
con azules y colorados a fines.
Vuestros bramidos son de confines
ya conocidos con hedor de encarroño.
Autor Francisco Pinilla Sánchez.
domingo, 9 de octubre de 2016
jueves, 6 de octubre de 2016
POR ENCIMA Y DEBAJO DE LA TIERRA
-En la ménsula de
nuestro balcón ,
el hibisco se siente amado
por ti.
Mi tacto rodea tu cuerpo,
siendo éste,
una colmena de hermosura.
¡ Ven mujer ! Quiero bailar
contigo,
unos boleros en el panal
de tu piel .
El rayo de luz penetra
furtivo
por la ventana de nuestra
alcoba , iluminando tu
cuerpo,
como la esfinge anhelada
por Egipto.
¡ Ah amada mía ! eres el
río Nilo que inundas mi
corazón,
del cual brota, - el papiro con
mis poesías -.
Los días van pasando a tu lado,
y nuestras conversaciones son
como las mariposas que vienen
a nuestro jardín.
Tú y yo, vamos creando
un libro en el tiempo.
Y antes que se baje el
telón
de mi último sueño
eterno
y el ciprés me abrace con
sus raíces mi corazón
azulado,
quiero ver el único paisaje
que amo
y amaré por encima y debajo
de la tierra, que es; tu persona
mi amor.
Autor : Francisco Pinilla Sánchez
nuestro balcón ,
el hibisco se siente amado

Mi tacto rodea tu cuerpo,
siendo éste,
una colmena de hermosura.
¡ Ven mujer ! Quiero bailar
contigo,
unos boleros en el panal
de tu piel .
El rayo de luz penetra
furtivo
por la ventana de nuestra
alcoba , iluminando tu
cuerpo,
como la esfinge anhelada
por Egipto.
¡ Ah amada mía ! eres el
río Nilo que inundas mi
corazón,
del cual brota, - el papiro con
mis poesías -.
Los días van pasando a tu lado,
y nuestras conversaciones son
como las mariposas que vienen
a nuestro jardín.
Tú y yo, vamos creando
un libro en el tiempo.
Y antes que se baje el
telón
de mi último sueño
eterno
y el ciprés me abrace con
sus raíces mi corazón
azulado,
quiero ver el único paisaje
que amo
y amaré por encima y debajo
de la tierra, que es; tu persona
mi amor.
Autor : Francisco Pinilla Sánchez
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