La gloria a la estupidez impuesta,
da racimos de tontos que apesta.
A ti mujer, los batos fascistas
con sus esvásticas idiotas
que no vemos y se ven como gaviotas,
quieren que tu vientre, sea rentas
para sus santones de misas y fiestas
rancias. Tu vientre es tuyo mujer, y nada quitas.
En el cielo de sus bocas muestran
colgados sofismas, para que te hieran.
Y a tu vientre mujer, llegaron
hoy los parásitos del pasado cabrón,
- violando- para quedarse en él, los que robaron
niños a sus madres, y se los dieron
a éstos que hoy devoran y partieron
tu persona. Tu vientre es tuyo mujer, y no, de los que encarcelaron.
Poeta: Francisco Pinilla Sánchez